La importancia de traducir los trabajos de investigación científica

La comunicación es fundamental para la comunidad científica. También son fundamentales para fomentar el conocimiento científico los servidores de prepublicación ― donde se comparten primeras versiones de artículos académicos, la revisión por pares en las revistas académicas internacionales, y las conferencias, en las que se comparten las ideas en una escala mundial.

Pero no es suficiente asumir una lingua franca o simplemente publicar todo en inglés. A continuación presentamos cinco razones por las que hacerlo sería un error y por las que debería pensar en traducir sus trabajos de investigación científica.

1. Se reducen los colaboradores potenciales

Trabajos de investigación de gran envergadura requieren colaboración internacional, como por ejemplo el Gran Colisionador de Hadrones en CERN o el desarrollo de vacunas contra la COVID-19 en 2020. Incluso trabajos más pequeños pueden beneficiarse de compartir datos entre equipos localizados en distintos países. Es posible que diversos equipos ni siquiera sepan de la existencia del otro si no han llegado a ver los artículos de otros colegas.

2. No se descubren equipos competidores

La otra cara de la primera razón es no saber que, por ejemplo, puede haber un equipo en la Universidad de Beijing que esté investigando el mismo tema. Ellos escriben sus investigaciones en chino mientras tú lees publicaciones en español. Si tú publicas tus resultados en distintos idiomas, puedes llegar a rivales con quienes destacar diferencias o colaborar.

3. Se pueden perder becas y financiación

Para alcanzar la mayor cantidad de financiación, como becas de investigación y capital, considera la posibilidad de ampliar tu red a nivel mundial. Aunque el inglés es aceptado como una lengua universal para los artículos científicos, darás una mejor impresión a los inversores y a las organizaciones que otorgan becas si puedes demostrar la voluntad de compartir tus ideas libremente dentro de la comunidad científica global.

4. Se reducen las posibilidades de ser citado en otros trabajos de investigación

Los académicos se benefician enormemente de las citas en otras publicaciones, en periódicos, en textos y más. Es mucho más probable que esto suceda si te has tomado el trabajo de traducir para el escritor o colega que te cita. Es más, las citas promocionan el trabajo y hacen que tus investigaciones lleguen a más lugares y aparezcan más veces en los resultados de los motores de búsqueda.

5. Se limita la publicación internacional

Hay muchas revistas científicas que publican en otros idiomas, no solo en inglés. Un artículo señala que hay más de nueve mil revistas académicas con revisión por pares  en idiomas como el francés, el alemán, el español y el chino. ¿Por qué perder esas vías de comunicación vitales?

Ya sea por negocios o para fomentar la comunicación de ideas, no traducir tus artículos científicos puede ser un error. La comunidad científica es verdaderamente internacional y tu deberías serlo también.